Adivina, adivinador

Objetivo general

Descubrir el valor de la inteligencia que nos permite pensar, anticipar nuestras acciones yelegir de forma responsable nuestro comportamiento.

Objetivos curriculares

Que el alumno logre:

  •  Descubrir las diferencias entre los seres vivos y los no vivos.
  •  Comprender que existe una gran diversidad de seres vivos que poseen algunas características comunes y otras diferentes.
  •  Aproximarse a la definición de seres racionales.

Materiales

  • Hojas.
  • Elementos para escribir, recortar y pegar.
  • Revistas.

Actividad

Introducción:
Entregamos la ficha de trabajo y resolvemos de forma grupal las adivinanzas.
A partir de cada uno de los acertijos, conversamos profundizando en las diferencias entre los animales y los seres humanos, resaltando en todos los casos, nuestra capacidad de pensar y elegir libremente.
· Los loros hablan como los seres humanos, pero… ¿pueden comprender lo que están diciendo?
· El papagayo repite muchas frases, pero… ¿puede reflexionar sobre las palabras que dice?
· ¿Los animales pueden escribir palabras? ¿Por qué?
· ¿Los animales pueden leer? ¿Por qué?
· ¿En qué nos diferenciamos con el pájaro a la hora de buscar alimento? ¿Qué hacemos nosotros cuando tenemos frío o hambre?
· ¿Los animales pueden jugar a juegos donde se necesite pensar? ¿Por qué?

Desarrollo:
Cada uno trabaja en su ficha, pintando los seres vivos que aparecen en la ilustración.
Contamos cuántos hay y pensamos sobre la manera en que podemos clasificarlos.
Nivelamos los conocimientos sobre los seres vivos o bióticos y los seres no vivos o abióticos y reflexionamos acerca de las diferencias entre las plantas, los animales y las personas, respondiendo a las preguntas que figuran en la ficha.

Tratamos de descubrir entre todos, las capacidades que nos hacen distintos y diferentes de todos los otros seres vivos: nuestra capacidad de pensar, que nos permite:
· Conocernos a nosotros mismos, a los demás y a las cosas.
· Reflexionar, analizar y decidir aquello que tenemos que hacer.
· Darnos cuenta de nuestros errores y corregirlos.

La inteligencia es la capacidad de entender, asimilar, elaborar información y utilizarla adecuadamente. Implica el pensamiento y el conjunto de actividades mentales necesarias para conectar unas ideas (conceptos) con otras de acuerdo a ciertas reglas. La inteligencia está íntimamente ligada a la cantidad de conceptos que hayamos adquirido, comprendido, memorizado, percibido y racionalizado mediante la educación. El instinto animal en cambio, es la acción automática, casi mecánica, probablemente inconsciente, de los animales para alcanzar un fin determinado.
La inteligencia tantea, ensaya, se equivoca, cae en el error y se corrige de él, mientras que el instinto es innato, es decir, anterior a toda experiencia individual.

Cierre:
Trabajamos en forma grupal pensando en todas las situaciones a lo largo del día en las que pensamos y elegimos. Podemos representar alguna por medio de dramatizaciones.
Reflexionamos sobre la importancia de nuestra capacidad para pensar y elegir, que nos hace diferentes y superiores a todos los seres vivos.

Propuesta de actividad comunitaria

Averiguamos cuándo y porqué se celebra el día del animal y armamos un mural recortando figuras de distintos animales y resaltando sus características más sobresalientes.
Nota: el día del animal se celebra en homenaje al doctor Ignacio Lucas Albarracín, un incansable luchador por los derechos de los animales, oriundo de San Juan. Su fallecimiento se produjo el 29 de abril de 1926 y por iniciativa de la Sociedad Protectora de Animales, se eligió este día para conmemorar el “Día del Animal”.

Para hacer en familia

Todos escribimos en distintos papelitos el juego de mesa o de ronda al que más nos gusta jugar en familia. Nos reunimos en familia, sacamos un papelito y nos disponemos a jugar al juego elegido. Para cada juego pensamos: Este juego… lo podrían jugar los animales… ¿por qué?

Relación con Valores

La práctica de esta actividad ayuda al niño a distinguir los seres bióticos de los abióticos y a descubrir y valorar las características propias de todos los seres vivos. Resalta las capacidades propias de los seres humanos, valorando su condición de ser racional dotado de una inteligencia que le permite pensar, conocer y elegir libremente sus acciones.A su vez, impulsa  al niño a reflexionar sobre el proceso de pensamiento, por medio del cual podemos anticipar nuestras acciones, reflexionar sobre nuestros actos y corregir nuestros errores.